Momentos de la Misa

Si bien este documento es coherente con los elementos litúrgicos de la Forma Ordinaria Litúrgica y con la documentación proveída por la Conferencia Episcopal Chilena, hay más de una forma de celebrar la misa: consulta con tu sacerdote y con tu comunidad.

Las recomendaciones entregadas son producto de años de experiencia conjunta, pero tu caso particular puede requerir acercamientos diferentes: no tengas miedo de experimentar y encontrar aquello que funciona mejor en tu comunidad.

Para los textos específicos de cada fecha, calendario de liturgias, y otra información relevante, dirígete a La Eucaristía Diaria de la Conferencia Episcopal de Chile.

La misa tiene cinco grandes secciones, llamadas ritos o liturgias, siendo la Liturgia Eucarística la más importante. A continuación colocamos en detalle cada momento:

I. Ritos Iniciales

Los ritos iniciales corresponden al comienzo de la misa. Están centrados en la preparación de la mente y el alma para participar del sacramento de la Eucaristía, poniéndonos en sintonía con Jesucristo y con la comunidad de Iglesia.

  • Canto de entrada: se inicia formalmente la misa. Usualmente acompaña a la procesión, es decir, la entrada formal del clero (sacerdotes y diáconos) que oficiarán la misa.
  • Señal de la cruz y saludo: El sacerdote se persigna y saluda a la asamblea:
SacerdoteEn el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
AsambleaAmén.
SacerdoteEl Señor Esté con ustedes.
-o-
La gracia de nuestro Señor Jesucristo, el amor de Dios nuestro Padre y la comunión del Espíritu Santo esté con ustedes.
AsambleaY con tu espíritu.
  • Acto penitencial: Se celebra la misericordia de Dios y se reconoce ante Él nuestra condición de pecadores. La reconciliación con Dios nos prepara a la Eucaristía. Se coloca un canto de perdón. Las fórmulas de esta parte son altamente variables y depende del sacerdote: tiene usualmente dos formas, una responsorial y otra en que canta el coro luego de una admonición del sacerdote; no obstante, usualmente terminan algo así:
    • Responsorial: El sacerdote hace tres invocaciones que se responden sucesivamente por la asamblea/coro (Señor ten piedad, Cristo ten piedad, Señor ten piedad). Debe coordinarse de antemano.
    • Admonición: El sacerdote hace una breve oración y luego el coro canta de forma continua.
Absolución del SacerdoteDios todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna.
AsambleaAmén.
  • Gloria: Oración o canto alegre y festivo realizado solamente en domingos y solemnidades. Tampoco se realiza en los tiempos de cuaresma y de adviento. Si no se canta, se puede hacer la oración:
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos,
te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso.
Señor, Hijo único, Jesucristo. Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre;
tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros;
tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica;
tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros;
porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo
con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre. Amén.
  • Oración colecta: Invocación realizada por el sacerdote en que se combinan los motivos del día (celebraciones de la Iglesia, de santos, etc.) que sintetiza las aspiraciones espirituales de la asamblea para la misa. Por esta razón varía de evento a evento, aunque suele terminar siempre con la misma frase:
SacerdoteOremos.
AsambleaBreve momento de silencio.
Sacerdote
(Ejemplo)
Dios Padre, que revelaste a los hombres tu misterio admirable al enviar al mundo la Palabra de verdad y el Espíritu santificador; te pedimos que, en la profesión de la fe verdadera, podamos conocer la gloria de la eterna Trinidad y adorar al único Dios todopoderoso. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.
AsambleaAmén.

II. Rito de la Palabra

El rito de la palabra es Dios quien habla a su pueblo: se centra en la lectura de textos bíblicos y su meditación, orientado por el sacerdote. Involucra la lectura de tres o cuatro textos, la homilía, el credo, y la oración universal. Los textos están determinados de antemano y están disponibles en el Leccionario.

  • Primera lectura: Puede del Antiguo Testamento, las cartas de San Pablo, o de los Hechos de los Apóstoles en tiempo de Pascua. Se lee desde el ambón. Se termina con la siguiente fórmula:
Lector/aPalabra de Dios.
AsambleaTe alabamos, Señor.
  • Salmo responsorial: corresponde a algún Salmo de la Biblia. Se lee desde el ambón. La palabra “responsorial” se refiere a que la asamblea responde con una antífona o frase. Se puede hacer completamente hablado, sólo cantar la antífona, o cantarla por completo. En el Leccionario cada Salmo tiene su antífona y una melodía, pero es posible utilizar otra antífona acorde a la temática del Salmo a realizar. Tradicionalmente la antífona se realiza entre cada estrofa, pero puede hacerse en otros ordenamientos (principio/final, bloques) según requiera la misa.
  • Segunda lectura: se lee algún texto de los Hechos de los Apóstoles, las Cartas, o el libro del Apocalipsis. Se lee desde el ambón. Sólo se realiza en domingos y solemnidades. Se termina con la siguiente fórmula:
Lector/aPalabra de Dios.
AsambleaTe alabamos, Señor.
  • Aleluya: del hebreo “Alaben a Dios“. Corresponde al canto de aclamación al Evangelio. No se realiza en cuaresma, aunque puede reemplazarse por una antífona que no contenga la palabra “Aleluya”. Es posible repetir la aclamación o hacer una diferente al final del Evangelio.
  • Evangelio: proviene de los textos de alguno de los cuatro evangelistas, es leída por un diácono, sacerdote u obispo. Posee respuestas tanto al comienzo como al final:
Al inicio
SacerdoteEl Señor esté con ustedes.
AsambleaY con tu espíritu.
SacerdoteLes anuncio {El Santo Evangelio | La Buena Noticia} según San <Evangelista>
AsambleaGloria a ti Señor.
Al final
SacerdotePalabra del Señor.
AsambleaGloria a ti Señor Jesús.
  • Homilía: usualmente realizada por un sacerdote o diácono. Corresponde a un breve comentario y prédica de aspectos relevantes de las lecturas escuchadas del día conectándolo con la vida concreta de la comunidad que celebra.
  • Credo: oración que profesa las creencias del feligrés católico. En español es más común el credo de los Apóstoles:
Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. 
Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor,
que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,
nació de santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto y sepultado,
descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos,
subió a los cielos, y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia católica, la comunión de los santos,
el perdón de los pecados, la resurrección de la carne, y la vida eterna.
Amén.
  • Oración universal: se presentan las intenciones de la comunidad dirigidas a Dios. Se leen desde el atril. Idealmente son formuladas libremente por la comunidad para reflejar sus anhelos e intereses propios, considerando siempre a la iglesia universal, los gobernantes y los pobres; de lo contrario se pueden utilizar las oraciones entregadas por la Conferencia Episcopal Chilena en el sitio Eucaristía Diaria.

III. Rito Eucarístico

El rito eucarístico es la experiencia central de la misa: mantiene el compromiso de la humanidad con Jesucristo de continuar con su memoria y renueva nuestra fe. Está compuesto por la presentación de los dones y la plegaria eucarística, la cual a su vez está dividida en prefacio, Santo, relato de la última cena, intercesiones y doxología.

  • Presentación de los dones: se presentan los dones de pan y vino al altar y se prepara la mesa para la Eucaristía. Se pueden presentar también otros elementos simbólicos relevantes para la comunidad o para el evento particular. Mientras ocurre esto, la asamblea realiza ofrendas, usualmente en dinero, a laicos designados, en canastas para dicho fin. Se canta mientras esto ocurre. La presentación de los dones termina con una invocación de la asamblea:
SacerdoteOren hermanos para que este sacrificio sea agradable a Dios, Padre Todopoderoso.
AsambleaEl Señor reciba de tus manos este sacrificio, para alabanza y gloria de su nombre, para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia.
  • Plegaria eucarística: oración que realiza el sacerdote que tiene como culmen la consagración en la que el pan y el vino se convierten el Cuerpo y la Sangre de Jesucristo.
  • Prefacio: Es una acción de gracias por lo que Dios ha realizado con su pueblo, especialmente por lo que ha obrado en Jesucristo. Comienza por un diálogo entre el sacerdote y la asamblea. Posterior a esto, se hace el resto del prefacio, que está definido previamente en el Misal Romano. Usualmente termina con una invocación que prepara el Santo, similar a “Por eso, con los ángeles y los santos, proclamamos tu gloria diciendo.”
SacerdoteEl Señor esté con ustedes.
AsambleaY con tu espíritu.
SacerdoteLevantemos el corazón.
AsambleaLo tenemos levantado hacia el Señor.
SacerdoteDemos gracias al Señor, nuestro Dios.
AsambleaEs justo y necesario.
  • Santo: es el canto más importante de la misa, en que se alaba la santidad de Dios. Empieza inmediatamente al finalizar el texto del prefacio. Al finalizar el Santo, comienza el momento más solemne de la misa; algunos miembros de la asamblea se pondrán de rodillas y se pueden hacer otros símbolos como bajar las luces de la iglesia.
  • Relato de la última cena: se realiza el relato de la última cena. Siguiendo el texto, se consagra primero el pan y después el vino, seguido de una reverencia del sacerdote, frente a la cual la asamblea baja la cabeza en señal de adoración. Esta sección termina con el diálogo, que puede ser cantado:
SacerdoteEste es el {misterio|sacramento} de nuestra fe.
AsambleaAnunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. ¡Ven Señor Jesús!
  • Intercesiones: el sacerdote realiza una serie de oraciones pidiendo por aquellos que participamos en la eucaristía, por la iglesia, y por los difuntos. Las formas de esta parte son variables, y pueden incluir temáticas actuales y relevantes a la asamblea. Cantar una antífona entre cada invocación es recomendado.
  • Doxología: es la culminación de la plegara eucarística, en la cual se da gloria a Dios Padre, Hijo, y Espíritu Santo. Puede cantarse si se quiere:
Por Cristo, con él y en él, a ti Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria,
por los siglos de los siglos,
Amén.

IV. Rito de Comunión

El rito de la comunión pone el foco de vuelta en la asamblea; los asistentes se preparan para recibir el Cuerpo y la Sangre de Jesucristo. Está compuesto por el Padre Nuestro, la oración por la paz, el saludo de paz, el Cordero de Dios, la comunión, y la oración poscomunión.

  • Padre Nuestro: Se reza el Padre Nuestro en comunidad. Si se conocen versiones cantadas, se pueden realizar. Es relevante que contenga el texto de la oración. Si se hizo algún gesto para el rito eucarístico como bajar las luces, ahora es tiempo de volver a la normalidad.
AsambleaPadre nuestro que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre.
Venga a nosotros tu Reino,
hágase tu voluntad así en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
No nos dejes caer en tentación
y líbranos del mal,
Amén.
SacerdoteLíbranos de todos los males, Señor, y concédenos la paz en nuestros días, para que, ayudados por tu misericordia, vivamos siempre libres de pecado y protegidos de toda perturbación, mientras esperamos la gloriosa venida de nuestro Salvador Jesucristo.
AsambleaTuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor.
  • Oración por la paz: Se reza la oración por la paz. Dependiendo del sacerdote, puede ser rezada solamente por él o bien por la asamblea completa.
Sacerdote o TodosSeñor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles: “La paz les dejo, mi paz les doy”, no tengas en cuenta nuestros pecados, sino la fe de tu Iglesia y, conforme a tu palabra, concédele la paz y la unidad. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos, Amén.
  • Saludo de paz: La asamblea comparte un saludo de paz entre todos los presentes. Se realiza un canto mientras esto ocurre. Este canto puede ser específicamente un canto de paz o bien un canto de Cordero. Mientras se realiza el saludo, los ministros de comunión deben subir al altar.
  • Cordero de Dios: Si el canto anterior no incluye la oración del Cordero, el sacerdote la recitará para la asamblea. Esta sección concluye con un diálogo con la asamblea:
Sacerdote
(sólo si no se hizo en la paz)
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, danos la paz.
SacerdoteEste es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Dichosos los invitados a compartir esta cena.
AsambleaSeñor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
  • Comunión: Si no hay canto, se reza una antífona de comunión, previamente definida para el día. Luego, la asamblea recibe el Cuerpo y la Sangre de Jesucristo. Se realizan cantos mientras esto ocurre. Es relevante calcular el tamaño de la asamblea de antemano para tener la cantidad adecuada de cantos para el tiempo requerido.
  • Oración poscomunión: Se reza una oración posterior a la comunión, la cual está previamente definida para el día.
Sacerdote
(ejemplo)
Te pedimos, Padre, que alimentados con este sacramento divino, memorial perpetuo de la Pasión de tu Hijo, este don de su amor inefable nos conduzca a la salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
AsambleaAmén.

V. Ritos de Cierre

Este rito concluye la misa. Se entrega la bendición y se despide a la asamblea. Si hay avisos de utilidad pública para la asamblea (actividades, horarios, otras indicaciones), es recomendable entregarlos antes de los ritos de cierre.

  • Bendición final: El sacerdote mediante el signo de la cruz bendice a la asamblea, que responde con el siguiente diálogo:
SacerdoteEl Señor esté con ustedes.
AsambleaY con tu espíritu.
SacerdoteLa bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, descienda sobre ustedes y los acompañe siempre.
AsambleaAmén.
  • Cierre y canto de salida: Se cierra la misa con un breve diálogo y el canto de salida. En tiempo pascual, se agrega el “Aleluya“.
SacerdotePodemos ir en la paz y la alegría del Señor [Aleluya].
AsambleaDemos gracias a Dios [Aleluya].